"Una parte de mí dice stop, fuiste muy lejos, no puedo contenerlo" (Charly García, Influencia)

Mientras nuestra generación se ahoga en el alcohol, sin ideas, con muchas esperanzas acerca de las lucas que vamos a ganar y de los pocos sueños que nos quedan, los más chicos vienen con más ganas. Si la historia es cíclica, una buena forma de demostrarlo es el paro convocado para mañana por los estudiantes secundarios. A que eso se unan las Ues, me parece irrelevante. Porque el problema claro, es el acceso. Los que manejan el moviemiento secundario, a diferencia de aquellos que barsamente nos comandaron -con el único valor de su ego- hace algunos años cuando vestíamos de pinguinos son infinitamente superiores. La calidad de sus voceros y especialmente su carisma y su capacidad organizacional hacen desafiar a Bachelet sobre su promesa de inclusión. Sobre todo, si ellos están haciendo inclusión teniendo representantes del Saint George y del A-44. Ahora claro, si deja a la Subsecre hablando con los Presidentes y el Ministro Zilic fue al Banco a hacer una diligencia no creo que sea muy "inclusivo"; si deja a la mitad de los estudiantes legitimados esperando en la calle tampoco. Lo siento por todos aquellos que creyeron que la transición podía llegar a ser eterna, pero estos cabros no tiene idea de quien es Pinochet, no lo vieron o tienen una idea vaga de él y de sus secuaces. Por lo tanto, los argumentos como "bueno en la dictadura (remember?) la cosa era mucho peor" ya simplemente no valen.
Hay una imagen que me viene a la mente cuando veo a los representantes de los estudiantes; la de aquellos que, inmersos en los últimos bastiones de lo que fue la gran educación pública, agarran la última tabla dentro de un mar desolado y tratan de nadar a puerto. No ha pensado Ud. que personas como Karina o César probablemente no lleguen a la Universidad que quieren: ¿Acaso no tienen la actitud?, ¿Acaso no confrontan?, ¿Acaso no tienen la inteligencia verbal, la garra?. Algunos se subirán a su barco. Nadie puede decir que éste es un barco sin destino. Suerte.