lunes, septiembre 11

Resulta que la fecha - de nunca acabar- se ha transformado ahora en el desenlace obvio de tanta demanda social dada por el kino millonario que "¿nos?" ganamos con la subida del precio del cobre. Hay harta platita, pero también harto gallo outsider y fuera del sistema que quieren romper con todo.La buena molotov en La Moneda, las patadas al Burger King y a los Bancos, capitalistas todos, mientras te pego duro con mi zapatilla Nike comprada a crédito en Ripley (¿quién puede estar libre de pecado?).
Acá hay un derecho a expresión de grupos diríamos minoritarios, pero la tele, Dios Mío. Ayer Chilevisión en su noticiario dominguero tenía a un pobre periodista en práctica, con chaqueta de cuero y corbata, que pedía "por favor" que la gente no saliera de sus casas, por las barricadas que habían en todo Santiago (?) y snif...no puedo continuar con tanto caos.
Chilevisión mete miedo de una manera rancia. Los noticiarios que son el programa más visto de la tele nos tienen agarrados de todos lados, repitiendo en cámara lenta los ataques a La Moneda y qué le vamos a hacer. Nadie está diciendo que esto no sea grave, pero cuando vemos luego a "Tolerancia Cero" con sus cuatro próceres minimizando daños y haciendo el análisis profundo de la noticia, la cosa se pone peor.
Porque "Tolerancia Cero" tiene el rating de los intelectuales o de los que pueden comprender y mientras, las noticias les meten miedo a todos, especialmente a aquellos que no pueden o no les interesa comprender.
Dos políticas de prensa. Esa analítica y seria que tanto nos gusta y la flaite, en cámara lenta con harto encapuchado y música de película de Mel Gibson, que es lo peor de lo nuestro.

Saludos desde el Burger King en llamas...
 
Escrito por Rodrigo Mora at 9:53 a. m. |


3 Comments:


At 9:06 p. m., Blogger BigFella

Hay cosas que nunca me van a entrar en la cabeza (y poca no tengo). Una, que los 11 de septiembre ya casi nadie se acuerde que mataron a un presidente elegido democráticamente (o obligarlo a suicidarse, que es lo mismo) y comenzó un régimen de terror. No es el Día de la Molotov, ni el Día del Resentido. Cada uno de nosotros ha sido defenestrado brutalmente, alguna vez, por el sistema capitalista. Lo seguiremos siendo, me temo. Sin embargo, no nos sentimos con el derecho (tal vez nosotros estamos mal) de tirarle fuego a nadie. Lo de las noticias es cuento conocido: quién las maneja, para qué mete miedo, y lo peor, cómo se salen con la suya todas las veces. Lo peor es que no es Chile no más: recuerden la campaña de Bush para sumar votos a sus políticas invasoras. Pero no estamos tan mal. Por lo menos algunos de nosotros, que votamos, que pensamos, que opinamos y aportamos, sabemos que el flaite ladrón y asesino existe, pero que no es más ni menos peligroso que antes. Aunque nos pongan en cámara lenta lo que quieran. El resto de la gente, bueno. Ya está bueno que salgan de la espiral de la idiotez.

 

At 12:29 p. m., Blogger Unknown

Yo vi tales comentarios , que rabia, como ns manipulan a todos. la idea es que nos espantemos, y que en nuestro corazón surja el deseo de el autoritarismo, "que venga alguien a poner orden", así , desde el miedo, al final de cuenta, dictadores se ven como buenos tipos.

PUAJ
CH

 

At 7:14 a. m., Blogger Kopacs

Alguién decía por ahí que la única prensa libre era aquella en que uno era el dueño.
Tema de lo más abordado, y que buena pelicula es el "Ciudadano Kane".